¿Que serían de los santos días sin sus soles dependientes que rielan la escena?
¿Y que serían de las taciturnas noches sin sus lunas que al gran sueño fragmentan?
Nada más que contradiccion y vacío eterno.
¿Que sería de la tierna plaza sin los concubinos del amor que la incendian en brasas inmortales?
¿Y que sería del árbol milenario sin el reposo de los zares pasionales?
Nada más que contradiccion y vacío eterno.
¿Que sería del poeta mentiroso sin su musa que lo sigue en los infinitos laberintos del fuego?
¿Y que serían de estos versos perdidos y encontrados sin la eternidad que los adjudica?
Nada más que contradiccion y vacío eterno.
¿Que serían de las tierras del roble sin el llanto que cae en rocío inmenso?
¿Y que sería de la verdad lacónica sin su velo?
Nada más que contradiccion y vacío eterno
Y por último:
Que sería del oro sin su anfitriona extranjera septentrional?
Y que sería de mí sin vos?
Vos y solo vos.
La elegida de todos, incluso del sol, la luna, el poeta y dios.
La elegida mía, mí musa en la vida, mí compañera cósmica.
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Autor:
el bardo (
Offline) - Publicado: 20 de diciembre de 2025 a las 03:49
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 1

Offline)
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