ERES COMO UNA DROGA

Si, sé que has entrado a mis días como entra un ciclón en la habana a medianoche... destrucción, desolación y una tristeza más oscura que una noche sin luna. Lo tuyo no sé cómo se dio, pero ocurrió esa primera vez que te vi, al cruzar nuestras miradas, cayeron los candados y cerrojos, que me habían protegido, en la nube de mi soledad acompañada.

Tu curiosidad por mis letras me hizo pensar que sabias poco de poesía, Para ti un verso de Neruda y el informe del clima solo eran dos escritos, sin importar lo que cada uno presagiaba y tu corazón solo una bomba que sirve al cuerpo. Ojos bellos pero vacías, pensamientos sinsabores, como cartón y esas manos de cirujano mal aprovechada.

Eres como una bella construcción, Vacía, sin muebles, ni habitantes, sin saber la función de cada una de sus pares. Acostumbrada a comer en restaurantes, dormir en hoteles, dialogar con clientes, cerrar negocios y firmar contratos. Tiempo para todos y para nadie, inalcanzable, perseguida y admirada como luna en octubre. Pero cruel, como viernes santo.

Eres como una droga. Empieza por curiosidad, después viene la sensación, el momento emotivo, la felicidad prestada por un momento. Y la resaca esperando agazapada detrás de una despedida y de nuevo al anexo del desamor. Purificar mis días, buscar redención o sanación, pero un alivio a esta adicción, a tus besos y las caricias del descuido de tu mirar.

.Ahora al volver la vista atrás, me veo sumido en la adicción de un cariño, la droga de tu amor, que me gustaba, me hacía daño, pero la necesitaba. necesitaba más de tus caricias frías, el tocar tu piel fría me daba escalofríos; efectos colaterales de la droga de tu amor., ahora al estar ya casi mil poemas sanos de ti, puedo asegurar que estos sano y libre.

LENNOX

EL QUETZAL EN VUELO