Eres Todo lo Vivido.

Eres los años que has vivido,
los besos que has compartido,
las mentiras que has tejido,
y el silencio mantenido.

Eres los favores hechos,
tus pecados y tus hechos,
las caídas y los trechos
que has logrado recorrer.

Eres risas y lamentos,
tus triunfos y tus tormentos,
tus fracasos y tus cuentos
que no dejas de tejer.

Eres "lo siento" y "te amo",
aquel "te quiero" callado,
y algún beso apasionado
que lograste conseguir.

Eres viajes y caminos,
el hogar de tus destinos,
la leña de los fríos
y la noche de un jardín.

Si lo piensas con cuidado,
eres todo lo pasado,
momentos que han quedado
como huella en el camino.

Eres todo lo que has sido,
lo callado y lo vivido,
el recuerdo preferido
y la esencia de tu ser.

Eres suma de instantes,
de amores y de semblantes,
de pasos vacilantes
y de fuerza al renacer.