El punto de mira

A veces un determinado día, nos enfadamos  porque las salpicaduras de un coche, nos ensucia la ropa en un día de lluvia, cuando deberíamos pensar en las maravillosas energías, que mediante el universo actúan en nuestro planeta, unas veces lo envuelven en la luz del sol y otras cubren el cielo de nubes; que evaporan las aguas de los estanques, lagos y ríos, y las devuelven en forma de lluvia, granizo o nieve. De ese modo equilibra las fuerzas naturales en el maravilloso ciclo del mundo. Bello es el cielo gris; maravilla hay en cada gota de lluvia; infinitos portentos encierra un copo de nieve. ¿Habríamos de olvidar todo esto  porque no sucede a medida de nuestro gusto o  deseos?