Cuando empecé a conocerte, amor,
tu nombre resonó en mí,
un toque suave en la puerta de mi corazón.
Te quise, te soñé, y luego, ¿qué fue de mí?
Comencé a amarte sin saberlo,
negándome a admitir tu verdad.
¿Era un protector de tu amor o un guardián de tu corazón?
Solo yo, solo yo lo sé en mi pecho.
Mi jardín está vacío,
le falta una flor que se fue,
sin dejar rastro de esperanza.
¡Y cómo te extraño, cómo te anhelo!
Mi anhelo, ¿dónde estás?
Respóndeme, por favor.
Regresa, que aquí te espero.
Hoy escuché la lluvia en el techo,
una melodía que me calma
como la belleza de la naturaleza.
Pero sin ti, mi poema, mi vida no es nada.
© 2025 Oney ✒️
-
Autor:
Oney ✒️ (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 18 de noviembre de 2025 a las 23:19
- Categoría: Amor
- Lecturas: 6
- Usuarios favoritos de este poema: Henry Alejandro Morales

Offline)
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.