Te oigo en las notas
de canciones de amor.
Te siento en el verde del olivo,
que me recuerda a tu dulce voz.
Te veo en matices, entre las calles
de Triana, te recuerdo en el reflejo
de tu dulce mirada.
Te huelo, entre la brisa marina,
te oigo cuando escucho “Andalucía”
y aún más apareces en mis recuerdos,
cuando pruebo un helado de mandarina.
España es más linda,
porque en ella habitas.
Y mis cinco sentidos, por ti se avivan.
Pues, sutil y tersa sevillana,
en los veranos de tu tierra
el sol crea sus melodías
que como rayos llegan,
para hacer ver con amada certeza
que las calles de Sevilla, contigo
se embelesan.
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