El Pensamiento en el Aire
William Contraponto
Hay un instante en que el pensamiento se desprende
y ya no pertenece al cuerpo que lo engendró.
Es como un soplo que encuentra al viento y se confunde con él,
perdiendo forma, ganando inmensidad.
Las palabras aún intentan retenerlo,
pero fallan como manos que quieren atrapar la neblina.
Todo lo que queda es el rastro de lo invisible,
un silencio suspendido entre lo dicho y lo que quiso ser.
Tal vez el aire también piense.
Tal vez haya una conciencia dispersa entre el ruido de las ramas,
entre el leve crujir de la ciudad que despierta hacia la nada.
Pienso que pensar es eso: respirar la duda,
dejar que se esparza hasta tocar el límite del propio aire.
Y cuando el viento pasa, llevo conmigo lo que no pude decir,
no como recuerdo, sino como presencia sin rostro.
El pensamiento, ese pájaro sin dirección,
encuentra refugio sólo en el espacio entre un soplo y otro.
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Autor:
William Contraponto (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 13 de noviembre de 2025 a las 10:45
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 140
- Usuarios favoritos de este poema: Hernán J. Moreyra, Mª Pilar Luna Calvo, MISHA lg, Santiago Alboherna, Tito Rod, Salvador Santoyo Sánchez, El Huagiro, Javier Julián Enríquez, Llaneza, JUSTO ALDÚ, Mauro Enrique Lopez Z., Éusoj Nidlaj, Tommy Duque, AnnaSerena28, alicia perez hernandez, El Hombre de la Rosa, Nelaery, David Arthur, leo albanell, Andiuz, Mael Lorens, Gloria Villanueva, WandaAngel, Texi, racsonando

Offline)
Comentarios7
Esos momentos en que, aparentemente, se desprenden y ya no pertenecen - yo diría que a la mente antes que al cuerpo - ocurren cuando logramos alejarnos de la acción cotidiana, son, yo los creo así, momentos mágicos en que nos liberamos del asedio al que estamos expuestos en el día a día, todos. En estos casos concretos - que en ocasiones provoco cotidianamente - procuro atrapar el diálogo que me surge y tomar nota de él porque es en esos momentos en que más cerca estamos a la conciencia y por lo tanto a la verdad íntima.
Estimado Nkonek Almanorri,
agradezco profundamente sus palabras tan lúcidas y sensibles. Usted ha expresado con gran belleza esa frontera sutil donde el pensamiento se libera y revela algo más íntimo y verdadero. Coincido en que esos instantes, cuando logramos apartarnos del ruido cotidiano, tienen algo de magia que nos permite escuchar lo esencial.
Un gran abrazo, querido amigo.
Interesante concepción, sin duda q algo de eso hay, q hay muchos pensamientos q no nos pertenecen, q son como del viento ...
muchas gracias por su lectura y por esa imagen tan bella de los pensamientos que vienen como viento. Aprecio de corazón sus palabras.
Un gran abrazo, querido amigo.
🙂
Muy buen texto William.. Tiene sustancia. Tiene materia. Saludos!
le agradezco sinceramente sus palabras tan generosas. Me alegra que haya encontrado sustancia en el texto.
Un gran abrazo, querido amigo.
Este poema flota como una meditación ligera y profunda, un viaje donde el pensamiento se vuelve criatura aérea y se desprende del cuerpo que lo originó. La voz poética observa ese instante de fuga con asombro sereno: las palabras, herramientas fieles, se revelan insuficientes ante lo inasible. El texto construye un clima casi místico, donde el aire parece pensar y la duda respira como una entidad propia. Las imágenes —neblina, ramas, crujidos, soplos— crean un paisaje etéreo donde lo indecible permanece, no como ausencia, sino como presencia sin rostro.
Saludos
agradezco profundamente su lectura tan atenta y su interpretación tan rica en matices. Sus palabras revelan una sensibilidad extraordinaria para captar esa atmósfera que el poema intenta sugerir.
Un gran abrazo, querido amigo.
Genial tu hermoso versar estimado poeta y amigo William
Recibe un abrazo desde España
El Hombre de la Rosa
agradezco de corazón tu lectura generosa y tus palabras siempre tan luminosas.
Un abrazo fraterno,
William
....Y cuando el viento pasa, llevo conmigo lo que no pude decir,
no como recuerdo, sino como presencia sin rostro.
El pensamiento, ese pájaro sin dirección,
encuentra refugio sólo en el espacio entre un soplo y otro......
pensamientos vienen, sin invitación, acompañamdo uno durante un viaje a la intimidad de uno mismo.
Un abrazo William
David
Gracias por acompañar el poema con tu propia profundidad.
Un abrazo grande,
William
"...entre el leve crujir de la ciudad que despierta hacia la nada..." ¡Qué belleza! Buen poema. Un saludo, poeta William.
Un saludo enorme, poeta,
y mi gratitud por leer con tanta delicadeza.
William
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