Mi kriptonita

Cómo te digo que las cosas jamás dejaron de ser
cómo te digo, o te muestro lo que siento, para que te quedes

Sé que pedirlo no es algo que vaya conmigo
y a esta altura,
no creo que suceda

Cómo te digo que mi poder es que, una vez que están conmigo,
encuentran al amor de su vida

y cómo te digo que me alegro que decidas no estar conmigo

sé que es difícil, para mí,
mirarte y negarme día a día que nada siento,
que nada me mueve,
que tu sonrisa no me despierta nada
que tus mambos…
esos malditos mambos
son, al final, mi kriptonita

¿Y si te digo que siempre tuve la respuesta?
sí, la tengo desde el día uno
solo que estoy esperando
a que sea compatible con la tuya

Cómo te digo que, en momentos así, sé que el amor, este amor
no va a irse aunque yo intente dejarlo ir...

¿y si te digo que amarte no me es fácil?
ja…
¿y si te digo que el alcohol pega un poco de más
cuando no soy lo primero en tus planes?
(pero en planes de amor…)

Sí, hay días como hoy, en los que prefiero que termine todo
pero agarro una carta y me dice:
“estás en el lugar correcto”

¿entre qué?
¿en el lugar de no ser vista?
jaj

¿Y si te digo…?
que no sé qué decirte más…
más de lo que ya sabés que te voy a decir.