UNAS LETRAS Y DOS METAFORAS CADA MAÑANA

Cuando abras los ojos esta mañana y la noche este enviando los últimos mensajes, estarán mis poemas sobre tu computador. Como sol, tomando posesión de tu cuerpo y de tu mente en un orgasmo textual. Te levantaras como siempre poniendo tu bata y presurosa, pondrás el café en la mesa y tu mejor sonrisa en tus labios, deletreando cada palabra y traduciendo mis metáforas.

Cuando dejas tus sueños rotos enredadas en las sábanas de las viejas noches, sudorosas o con sabor a rutina, sales corriendo despacio como fuerza centrífuga ya ahí con aroma de café y desnudando los pensamientos, te entregas a mis versos, letra por letra, buscando la palabra clave. Tus ojos en medio de procesión de imágenes acompañada de pensamientos únicos.

A veces cuando no te escapas en sueños, la noche es un martirio, según me dices; soportar intervenciones y obligada de tu carácter, que terminaba en frustración y vuelve la espalda con espalda y la pregunta ¿Qué hora es?, así lo dices en tu muralla emocional. Brincas tu sueños y llegas a saborear esa taza de café, a veces te, pero siempre la caricia enviada y un beso.

Yo siempre espero, cuando subo un poema y estas conectada a mi pensamiento, recurro a la sensación que provocara en ti y tu exquisita forma de esquivar, de decirlo de alguna manera que me estas leyendo, pero el papel de estrella inalcanzable no te deja decir más de dos tres palabras que todos entienden, pero tu gesto hacia mí, es respuesta, emoción, saberte amada y esperada

Me gusta verte recargada sobre tu ventana, viendo renacer el sol a lo lejos y muy cerca mis escritos, degustándolos con café y viendo el lecho de tu alcoba como un sepulcro donde quedaron esos sueños que ayer te emocionaban como hoy lo hace la esperanza de emprender esos viajes de tu pensar, acompañada del café y la ilusión de una letras y dos metáforas

LENNOX

EL QUETZAL EN VUELO