Aparenta ser humano,
pero no es cierto, no lo es,
nunca lo ha sido.
Tiene apariencia de humanidad
apetencias varias,
morales o de otro tipo
solo simula
dado que no posee un alma humana.
No nació humano
nació, como todo reptil,
de un huevo.
Su raza nos antagoniza
lucha por quedarse
con nuestro espacio vital
en esta galaxia
y en otras donde campea
la raza humana.
Su hambre de recursos
es ya legendaria.
Los humanos de la tierra
no son los únicos humanos,
nuestras diferencias son muy pequeñas:
diferimos en el tamaño, el peso,
el color de ojos o de pelo,
la manifestación de poderes psíquicos
o la más absoluta normalidad.
A él, al reptil,
no le preocupa nuestro fin
no le interesan nuestras agonías
ni el perverso demonio de la guerra
que muestra ostentoso los colmillos,
y aullando, feroz, nos amenaza.
No le importamos
porque no es de nuestra raza
se comporta como uno de nosotros
camina como uno de nosotros,
pero no siente amor,
ni vergüenza ni compromiso,
ni siquiera su mente produce sueños.
Lo más peligroso de él
es que tiene convencido
a todo el mundo
que su vida reptiliana
es invención conspiranoica,
es creación de las Redes Sociales,
es simulación de la IA,
Mientras él y los suyos
abducen felices e impunes
a gente sencilla e inocente.
OLLIN
05/11/2025
-
Autor:
Ollin (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 6 de noviembre de 2025 a las 10:57
- Categoría: Fantástico
- Lecturas: 2

Offline)
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.