Bebamos del veneno de amor…

Bebamos del veneno de amor…

Quiero ser tu caperucita roja y voy a en venerarte con mi amor,

Comerás la manzana que lleva mis te amo, mis te quiero y mis besos,

Mis abrazos, y el fuego que erosiona como lumbre todo mi cuerpo que

Quiere sentir tu cuerpo en erupción, quemándose en mi fuego que arde

De pasión por ti. tú! que por mucho tiempo has sido mi veneno y lo bebí

Voluntariamente, pero tú me diste una estocada por la espalda cuando me

Abandonaste para irte con ella, ¿Dime quién enveneno a quién?  

¿Yo quisiera saber que quieres? ¿Es amor de verdad? ¿Es un juego?

No puedes decir que no me conoces, comías conmigo, tomábamos café,

Estábamos juntos todo el día, nos hemos buscado toda la vida, porque nos gusta

estar juntos, ¿ahora dices que soy un misterio? Mas misterioso eres tú,

no sé quién eres? Te cambias de nombre como cambiarte de calcetines.

Tal vez no lees, lo que escribo aquí; aquí esta escrita toda mi vida y tú estás en ella.  

Quisiera que nos envenenaremos de amor y que juntes tu vida con la mía,

Que caminemos juntos las millas, que nos falten por vivir, quiero que descubras

los misterios de mi cuerpo y te asombres de quien soy, cuando me tengas toda tuya,

y tú seas todo mío, y te descubras ante mí, como eres en realidad, no me trates

como si no conociera tus andanzas con una y con otra y con aquella.

Yo quiero todo o nada, aunque ya dijiste que soy un nada que no logras

Descifrar, yo descubrí mi alma ante ti, y ahora te toca a ti que seas sincero conmigo.

Bebé mi veneno, porque quiero que muramos envenenados AAmándonos!!

Ámame más de lo que te amo yo te dije; ¡pruébame que me amas más que yo!

Te pierdes, cuando no tienes respuestas. ¡Te amo! Respiro tu nombre y

Todavía soy un misterio para ti. ¡Ámame, aunque sea un misterio que amas!

Me Tienes Y Me Tendrás Toda La Vida!!

Alicia Pérez Hernández… México

No es la pluma la que escribe, es el alma

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Si me quieres, quiéreme entera,
no por zonas de luz o sombra…
Si me quieres, quiéreme negra
y blanca, y gris, verde, y rubia,
y morena…

Quiéreme día,
quiéreme noche…
¡Y madrugada en la ventana abierta!…
Si me quieres, no me recortes:
¡Quiéreme toda… O no me quieras.

Si me quieres, quiéreme entera, de Dulce María Loynaz