Brillaba el sol
un martes de septiembre
en la mañana.
Unas gaviotas,
graciosas, paseaban
junto al paseo.
Cerca, en la playa,
llegaban, con rumores,
unas resacas.
El manto blanco,
que visten, bien las olas,
día tras día.
Aunque en algunos,
y si hace temporales,
cambia a dorado.
Muy poco a poco
se abren las ventanas
en los balcones.
Y cobra vida
el mundo y las personas
en la jornada.
Pueblo de pesca
con gente marinera
en las bodegas.
Miran las redes,
ajustan los anzuelos,
fuman un rato.
La vida sigue
se estira en un paréntesis
y continúa.
Y tú sonríes,
suspiras en silencio
y das las gracias.
Gracias al cielo
por ver este regalo
de sol y luz.
Rafael Sánchez Ortega ©
21/10/25
-
Autor:
Pyck05 (
Offline) - Publicado: 24 de octubre de 2025 a las 07:51
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 13
- Usuarios favoritos de este poema: Nelaery, MISHA lg, Mauro Enrique Lopez Z., Éusoj Nidlaj, Texi, alicia perez hernandez

Offline)
Comentarios1
hermoso agradecimiento
a una vida bien vivida poeta
bellas letras llenas de naturaleza
gracias por compartir
La vida sigue
se estira en un paréntesis
y continúa.
Y tú sonríes,
suspiras en silencio
y das las gracias.
Gracias al cielo
por ver este regalo
de sol y luz.
besos besos
MISHA
lg
Gracias Misha.
Abrazos.
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