El reloj de la pared marcó las 6 de la tarde cuando la rama del arbol de la ventana del salón,
donde dictaba Andrea vivenciales rompió la ventana a causa del viento y la luz parpadeó,
pequeño susto nos llevamos -el día de sol se había tornado tormentoso y uno que otro trueno sobresaltaba
mi corazón cuando recordé lo que había pasado, hace unos días mientras iba al médico en el verano, por la calle Esperanza altura Desesperación tres cuartos de Locura,en el edificio aledaño al nosocomio donde íbamos a atendernos
con Fernanda nuestra endocrinóloga un lingera se había trepado a un segundo piso por un muro desmoronado que simulaba ser una
escalera a la reja de la ventana del segundo piso de la casa, el pobre hombre demente aferrado
con sus manos gritaba :¡Marcela Marcela volvé! los vecinos muy preocupados sin saber
cómo hacer para que él bajara decidieron llamar a 911, eso escuchaba al pasar mientras apuradas pasábamos por la vereda
y veíamos rescate dramatico. no supimos qué pasó unos días después por el noticiero nos enteramos que el ligera en realidad se llamaba
Mariano Morales era un hombre al que hacía un tiempo la mujer lo habían dejado y se había deprimido, ese día los paramédicos lo
rescataron y días después falleció de soledad y amor,
lo curioso Y escalofriante es que la casa, la ventana y Las rejas permanecen cerradas con candado y según
dicen los entrevistados que los días mas tristes son cuando al abrir las ventanas se
escucha la voz de Mariano morales susurrar
¡Marcela!, ¡Marcela volve! Y suena una canción perturbadora.-
Eva Estella Parejas Manzanal
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Autor:
Eva Estella Parejas Manzanal (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 24 de octubre de 2025 a las 01:14
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 4
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, Andy Lakota👨🚀

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