La Dulce Animadora y El Chico Devoto

vampiro_dulce

Todo empezó cuando él terminó,
Me miraste distinto, y todo cambió.
Dios nos miraba, fue algo difícil,
Y mi conciencia ardía, febril.

Catequista amorosa, me hiciste llorar,
Sin darte cuenta, me hiciste amar.
¿Fue pura ayuda, o fue destino?
Tu fe me guió… por otro camino.

Parecía amor, y puede que sí,
Pero un amor así no tiene fin.
Me confundías, sin poder dormir,
Tu voz me abrazaba, quería seguir.

Aquel día no esperé tu beso,
Te sonrojaste, dijiste “lo siento”.
Pensaste en culpa, yo dije que no,
El beso volvió… el tiempo pasó.

Fue amor prohibido, pero existió,
Tú y yo riendo — el cielo nos vio.
Nos vimos de nuevo, tras la confirmación,
Aún te recuerdo, con amor.

Nos besamos de nuevo, con fuego y pasión,
Lo mantuvimos oculto, por pura emoción.
Éramos felices, aunque dolió,
Tus amigas hablaron — mas nada cambió.

Fue amor prohibido, y hubo fervor,
Tal vez temimos al mismo Señor.
Quizás Dios nunca lo aceptó,
Pero en el alma… siempre quedó.

 

 

  • Autor: vampiro_dulce (Online Online)
  • Publicado: 22 de octubre de 2025 a las 08:55
  • Comentario del autor sobre el poema: Cuando tenía 16, hace pocos años, entré a un programa de confirmación en mi colegio, tuve un catequista hombre y una catequista mujer, mi catequista hombre nos dejó muy pronto desafortunadamente, y me quedé solo con mi catequista mujer. Hubo amor verdadero, y aunque soy muy devoto a Dios, igual peco, y este poema lo refleja un poco y cómo me ganó la pasión
  • Categoría: Amor
  • Lecturas: 1
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.