EL JUEGO DE LA IMAGINACIÓN
En un rincón donde el sol filtra cuentos,
Stephano y su padre, sin más armadura
que risas y ramas, construyen su reino
con mantas, cojines y pura ternura.
Cada tarde el reloj se hace niño,
el tiempo se esconde, se encoge, se olvida.
Papá ya no es grande, ni Stephano pequeño:
son amigos que cruzan la misma vida.
El jardín se convierte en mapa secreto,
dragones de viento, castillos de flor.
Un caballero y su héroe perdido
se buscan y hallan con brillo y ardor.
—¿Sabes, pequeño, cuál es el tesoro?
pregunta el papá, con voz de verdad.
Y Stephano, con los ojos llenos de cielo,
responde: —El amor… y la amistad.
Entonces el mundo se vuelve un suspiro,
el suelo respira, los árboles cantan.
El oro no brilla en cofres cerrados,
sino en cada juego, en risas que encantan.
Porque jugar es un pacto sagrado,
una llave antigua que abre el ayer.
Y en cada aventura que inventan los dos,
la infancia decide no envejecer.
Día tras día, historia tras cuento,
Stephano y su padre alargan la luz.
Pues la magia no vive en varitas ni hechizos,
sino en quien juega… sin miedo a la cruz.
Y así se demuestra que el juego sincero
no es solo de niños, ni es cosa menor:
es puente, refugio, y también bandera…
el más grande mapa del verdadero amor.
© Corazón Bardo
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Autor:
CORAZÓN BARDO (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 17 de octubre de 2025 a las 08:45
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 1
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