Todo se mira luminoso y bello
cuando sus ojos de fulgor me anegan;
cuando sus labios a mi boca llevan
ese su néctar embriangante y célico.
Como palmera que acaricia el viento,
miro su estampa, que al andar ostenta
ese donaire de vestal helénica,
donde se agitan, de pasión sus fuegos.
Cuando su rostro con fervor contemplo
mirando absorto su sonrisa eterna;
pienso en la gloria que me da su lecho
cuando recibo su sublime entrega;
que trae efluvio, que los dioses griegos
dieron al nardo, que es de amor esencia.
Autor: Aníbal Rodríguez.
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Autor:
Rafael Escobar (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 14 de octubre de 2025 a las 10:00
- Comentario del autor sobre el poema: Soneto Asonante continuo en versos sáficos: 1, 4, 8, 10.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 3
- Usuarios favoritos de este poema: Antonio Pais
Comentarios1
Rafael poeta la verdad un soneto espectacular fue un placer leerlo me gustó muchísimo mis felicitaciones para ti poeta un abrazo cordial en la distancia
Gracias a ti apreciado amigo y poeta por dejar tu huella con tu presencia y generosa opinión pra mis letras de aprendiz. Mi fraterno abrazo lleva con el mi sincero aprecio a tu generosa amistad
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