En mi vida, una joya,
De oro puro, en mi camino,
Me puso,
Una joya, un diamante en bruto,
Que vale millones,
Muy hermosa,
Sabía y uy agradecida,
Una joya, a la que adoro,
Y quiero de corazón.
Una joya, con la que se puede hablar,
Consultar y preparar,
Planes de futuro,
Muy agradecido estoy,
De ponerme dios,
Una hermosa y linda mujer,
Que a mi corazón llena,
Y ocupa a diario,
Aunque conquistarla, me costó,
Lo repetiría, otra vez.
Somos almas gemelas,
Con una mirada, nos entendemos,
Con un gesto, sabemos lo que queremos.
Es el sol,
Que a mí corazón, ilumina,
Y da calor, para poder continuar,
Siendo más fácil, aumentar la felicidad.
Un corazón muy grande tiene,
Con amor a rebosar,
Que más se puede pedir,
Dios sabe, lo que cada uno necesita,
Y conmigo acertó,
Y con ella, hasta el fin,
Quiero seguir,
Única para mí es,
Mi alma gemela,
Somos uno,
Nos cuidamos mutuamente.
La vida con ella,
Maravillosa es,
Y por nada la cambio.
-
Autor:
Adoradom (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 9 de octubre de 2025 a las 18:57
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 12
- Usuarios favoritos de este poema: WandaAngel, sardach, Enrique Fl. Chaidez, Mauro Enrique Lopez Z.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.