El precio del destino

En el torbellino de luces, donde el alma se pierde,

una historia se cuenta, que el alma hiere.

Sus ojos brillaban, con sueños de pasión,

pero el destino cruel, le rompió el corazón.

Fuerza en la mirada, temple en el andar,

tuvo que elegir, su destino labrar.

Por un camino seguro, de pan y de abrigo,

donde el alma no sufre, ni vive en castigo.

Él juró quererte, bajo la luz de la luna,

pero sus promesas, se las llevó la bruma.

La vida es dura, y hay que sobrevivir,

aunque el alma llore, y no deje de sentir.

Fuerza en la mirada, temple en el andar,

tuvo que elegir, su destino labrar.

Por un camino seguro, de pan y de abrigo,

donde el alma no sufre, ni vive en castigo.

Ahora camina, con paso firme y sereno,

dejando atrás el amor, y su dulce veneno.

La conveniencia es su escudo, su fiel compañera,

en esta cruel batalla, donde el alma se quiebra.

Fuerza en la mirada, temple en el andar,

tuvo que elegir, su destino labrar.

Por un camino seguro, de pan y de abrigo,

donde el alma no sufre, ni vive en castigo.

Pero en las noches frías, cuando nadie la ve,

sueña con aquel amor, que nunca podrá ser.

Y aunque la vida siga, y el tiempo cure,

en su alma siempre habrá, un amor que perdure.