Yo soy

Salvador Galindo

Yo soy el Sol de mis fantasías

yo soy la fuente de mis errores

yo soy la roca que encara a la mar

yo soy el mar seducido por la roca

yo soy la ventana que mira hacia mi soledad

yo soy la noche

yo soy la raíz de la planta que crece para la raíz

yo soy el oxígeno que se respira a si mismo

yo soy el vómito interno de ser yo

yo soy el hambre deliciosa de no ser

yo soy la furia inocente

yo soy el miedo elegante

yo soy el niño que orina conocimiento

yo soy el cuco que dormita en el abuso

yo soy el monstruo sin vejez

yo soy la vista de mis ojos

yo soy el apéndice extraviado

yo soy la caída libre

yo soy la muñeca inflable de mis fantasías

yo soy el puente que solloza por gravedad

yo soy la lágrima que anhela ser lluvia

yo soy el semáforo que anhela el accidente

yo soy el correr sin velocidad

yo soy el que come luces para dormir

yo soy el odio de lo que ya amó demasiado

yo soy el odio de lo que aún ama demasiado

yo soy el bozal atado hacia el perro

yo soy ladrido sin voz del perro

yo soy silencio que no quiere serlo

yo soy universo sin tierra

yo soy la tierra sin el universo

yo soy mi propio pecado y salvación

yo soy la antena televisiva conectada a mi cerebro

yo soy todos los canales de mi antena televisiva

yo soy el imán ignorando al metal

yo soy el metal ignorando el imán

yo soy el enchufe asexual

yo soy la cortina que oculta el polvo de la noche

yo soy el polvo de la noche

yo soy el polvillo que emprende viaje a lo nasal

yo soy el teléfono que habla para sí mismo

yo soy la mujer de sábanas arriba

yo soy la sábana que se resiste a soñar

yo soy el sí de las niñas

yo soy la musa activa que posee como tótem al poeta

yo soy el roble que no leña

yo soy el nombre que no es noble

yo soy el noble sin nombre

yo soy el que se pisa los callos

yo soy el excremento que advierte donde pisar

yo soy el salvador cesante

yo soy el palomo sin mensaje de paz

yo soy el “rompe-paga”

yo soy la droga inmune

yo soy el arco atragantado a pelotazos

yo soy la taza de café cargada de rabia

yo soy la electricidad de la mañana

yo soy el reverso de la moneda

yo soy el yoyo contraproducente

yo soy la pistola inerme

yo soy el brazo oscuro inanimado

yo soy la furia pránica de la piedra

yo soy el movimiento sin reflejo

yo soy la piedra que manda sobre la sequía

yo soy el fantasma con vestidura nupcial

yo soy el fantasma y la vestidura nupcial

yo soy el voyerista de lo que no se ve

yo soy el voyerista de lo que teme verse

yo soy el voyerista de lo que teme ser visto

yo soy la relatividad sin referente

yo soy el espacio tiempo sin vergüenza

yo soy todos los nombres

yo soy todos los números

yo soy todos los años y secretos estrellados

yo soy la hueste infinita entre el 1 y el 2

yo soy el uno que desconoce al dos

yo soy el dos que persiste en ser dos

yo soy el uno y el dos sin ser el uno y el dos

yo soy la idea de muerte que respira lo abstracto

yo soy el viento que sopla con el fin de volver la tierra una pluma

yo soy la espada masoquista en su filo

yo soy la flecha que mata al Cupido

yo soy el dedo que aprieta el botón

yo soy la huella digital de todo dedo

yo soy el dedo que deviene mano

yo soy la mano masturbando al destino

yo soy el otro diferente al de mi foto

yo soy el otro diferente al de mi poema

yo soy el otro diferente al de mi diferencia

yo soy la hembra sonriente en mi ambigüedad

yo soy el tesoro redimido de todo precio

yo soy el que subyace a la vista en un espejo

yo soy el que media entre los diálogos

yo soy el mercado negro entre monólogos

yo soy el caballista del 0 que galopa hacia la disolución de su dígito

yo soy la banda sonora de mi vida

yo soy la película ABC de mi vida

yo soy el videojuego de mi vida

yo soy “eso”

yo soy horca

yo soy cuello

yo soy miles

yo soy cientos

yo soy el escalofrío de la mente

yo soy el coito entre la planta y la luz

yo soy el Sol de mis fantasías

yo soy la suma entre el menos y el menos

yo soy el lápiz que antecede a lo escrito

porque es la causa de lo escrito

yo soy el lápiz que antecede a lo escrito

porque quiere ser lo escrito

yo soy el lápiz que antecede a lo escrito

porque quiere ser yo

Y YO SOY...

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