Metáfora

Tu piel es un mapa que mis dedos recorren,
cada curva, cada valle, cada fuego secreto,
es un idioma que no necesita palabras,
solo susurros que arden en la sombra.

Tus labios son abismos que me llaman,
mi respiración se enreda en tu aroma,
y el tiempo se disuelve entre jadeos y caricias,
liberando deseos que creían dormidos.

Tus manos dibujan mi nombre en tu cuerpo,
y yo me pierdo en la intensidad de tu contacto,
como si tocarte fuera tocar la eternidad misma,
un rito donde el placer es conocimiento y libertad.

Entre susurros y gemidos,
cada roce es un incendio que no cede,
cada abrazo un océano donde naufragar
es la única forma de sobrevivir.

Tu piel es metáfora de todo lo que quiero,
territorio sagrado y salvaje,
puente entre la pasión y la ternura,
donde entregarse es entenderse sin miedo.

Y cuando finalmente nos rendimos,
los cuerpos exhaustos pero deseantes,
la libertad nos recorre como un río
que nunca deja de buscar su cauce.

MAQUIAVELICA