Yo soy laberinto de emoción perdida,
lamento callado de amores fugaces.
Un cúmulo triste de alegrías fallidas,
abrazos tirados en seres rapaces.
De un cupido necio la flecha que un día
desvió un viento fuerte y el blanco perdió.
Soy soplo que tu alma soltó una mañana
vagó por el mundo y nunca más volvió.
Soy brecha olvidada que no se transita
porque nunca lleva a ningún lugar.
Suelo polvoriento, que olvidó la lluvia
que nunca se siembra, que estéril está.
Soy árbol marchito que muere despacio
que nunca dio fruto, por más que intentó.
Soy barco encallado que en arena seca
la brisa marina reclama su espacio,
carcome su cuerpo y el tiempo olvidó.
12 de septiembre 2025
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Autor:
Juan Aguiar (Seudónimo) (
Online) - Publicado: 14 de septiembre de 2025 a las 19:05
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 10
- Usuarios favoritos de este poema: Kmony Quiñonez(monina), Mauro Enrique Lopez Z., norma aviles

Online)
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