Me dices que nada pasó,
que solo fueron amigos,
pero tus ojos me delatan
lo que tu boca calla.
Cada mensaje borrado,
cada risa que no era mía,
cada abrazo que buscaste en otros brazos
arde en mi memoria como fuego.
Me hablas de amor y promesas,
pero tu cuerpo y tu mente
habitan secretos que me rompen,
y yo camino sobre cristales
que tú pisaste con desdén.
Dices que fue un instante,
que no significa nada,
pero tus gestos, tus murmullos,
me gritan lo que niegas.
El perfume de otro en tu piel,
las llamadas que escondiste,
los lugares que visitaste
con quien no soy yo…
todo eso quema mi alma
y desangra mi confianza.
Intento mirar tus palabras
y creer en tu amor,
pero cada mentira
es un filo que corta mis entrañas,
y cada “nunca más” que dices
suena hueco, vacío, cruel.
Me prometiste fidelidad,
y hoy la realidad me duele:
el abrazo que juraste solo mío
fue compartido en secreto,
y el amor que creí intacto
se manchó con tu traición.
Camino entre la duda y la furia,
con el corazón sangrando
por lo que fuiste y lo que ocultaste,
y mientras tu negación me confunde,
aprendo que la verdad del otro
puede destruir más que mil despedidas.
Mentiras que sangran,
mentiras que duelen,
mentiras que quedan
como cicatrices invisibles
en el pecho del que creyó,
del que amó,
del que todavía espera
que algún día la verdad
se vuelva un abrazo sincero.
-
Autor:
Daniii (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 13 de septiembre de 2025 a las 07:37
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 4
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.