Poesía del Adiós

Tan pronto la noche alumbre 
vas a salir en busca del mar 
y donde yo te hable, me recordarás 
no temo escapar así, sólo esta vez 
y todas tus palabras dulces 
se adueñan del silencio 
y entonces hablo sin hablar 
detrás de este nido blanco 
nos miramos ya sin máscaras 
y en torno a tí voy construyendo mi casa
tengo miedo de que el tiempo se acabe 
y tan veloz cambie mi querer 
pero hoy una larga carta te llegará
y donde yo te escuche, me oirás 
tan pronto el dulce mar nos cante 
y entre su brisa recortada 
yo te amaré más que nunca 
sobre una mancha azul 
ves como baila la soledad
y es que solo así puedo imaginarte 
y tu atroz mirada
bajo las alas de la espera
viendo las cenizas pasar hasta el fin 
y hoy te escaparé, amor 
yo no puedo salvar al sol 
de toda noche gris
y la oscuridad eterna se transformará
en flores de miel 
y allí donde deje mis frutos 
los peces de colores se los comerán
y a tu enseñanza volveré, ahora y siempre 
y donde yo te vea, me recordarás 
siento que esta noche dormirá
y los peces de colores, en remolinos 
se juntarán en nuestras bocas 
y hoy estás tan transparente 
que creo ver el centro del cielo 
y la luz sobre esta ciudad enloquecida 
tan pronto me reveles 
yo viajaré entre nubes de sal 
y donde el dragón diga adiós 
todo este sueño se desnudará 
de esas venas de soledad 
sangraba la cruz 
y en tus mismos ojos 
dios resucitaba 
y así yo te ame hasta el amanecer 
conectaré en tí una amarilla canción
la misma que de mi piel nació
y se fundió en tu boca 
hoy al mediodía toda la música 
volverá al oculto laberinto 
y mis poemas serán quemados
bajo la luz en espiral
y en un sacrificio angelical
las palabras volverán al silencio 
y por el bosque la misma historia 
el orgasmo de los dioses 
y aquella soledad vencida 
desnuda y extasiada
sobre un libro antiguo

¡Adiós dulce viento!