Si para ver la luz de un sol soñado,
debí cruzar senderos tan oscuros,
llevo muy bendecida mi cicatriz,
porque ahora mi vida es muy feliz.
Porque en la lucha de mis años pasados,
hoy recojo los frutos que he sembrado,
y por mi ayer no hay nada que temer,
pues la vida me sonríe con mucho poder.
Y es que tengo unos hijos que me desbordan de amor,
llenando mi vida de paz y de color,
por eso a mis tesoros con orgullo los bendigo,
porque con sus logros siento mi mejor abrigo.
Laura Meyer
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Autor:
Laura Meyer (
Online)
- Publicado: 4 de septiembre de 2025 a las 00:47
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 1
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