Cántico de Gratitud

Cántico de gratitud
de Wcelogan

Susurra el viento que respiras,
baila la luz que danza en tu ventana,
sigue la sombra, constante y fiel,
cuando la soledad se cierne,
cuando el silencio se posa.

No midas lo que falta;
en lo poco mora la abundancia,
en lo mínimo florece la gracia.
Cada instante es altar secreto,
cada gesto, relicario invisible,
cada mirada, plegaria escondida.

Comparte el pan, comparte la palabra,
comparte la risa que enciende luminarias,
comparte el gesto, comparte el aliento;
que tu entrega sea ofrenda,
que tu entrega sea camino,
que tu entrega sea luz que se expande.

El universo escucha,
inmenso como un coro sin fin,
responde en frutos eternos
lo que diste con manos abiertas,
lo que diste con corazón abierto,
lo que diste con alma entregada,
se multiplica como bendición.