Le susurré a mis latidos que tu amor es verdugo
Porque me condena a extrañarte y por tu Ser a alabarte.
Porque taciturno y bohemio a pensarte
madrugo
Mi querubín de jade que de lejos solo puedo pensarte
De tu cuerpo soy prisionera
Con la libertad que el secreto exacerba.
No hay noches de luna lisonjera
ni días donde la pasión no hierva.
Le susurré al tiempo en gran manera
Porque en tus manos soy utópica trilogía
Que milita en silencio por la espera
Sin tu inmarcesible ambrosía.
Patry.
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