Thereminista

MarianneLopez

Me habitó algo que no se ve. Una frecuencia. Una línea de aire vibrando sin forma, casi como un dios pequeño jugando a no existir.

No te toqué. Pero mi piel sabe que estuviste. Tu ausencia se derrama por las esquinas, flota en las luces que no apago, habita mis gestos más simples: el parpadeo lento, la risa que no sale, las manos que buscan sin saber qué.

No hablaste, pero tu silencio sigue cantando en mi pecho, como si el corazón fuera una antena rota buscando tu eco.

Sigo moviéndome con cuidado, como si el aire pudiera romperse, como si todavía quedaras colgado en alguna nota que no terminó.

Te juro que a veces siento el mundo desafinar cuando no estás.

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.