El canto de sirenas, las luces en la disco, las botas negras hasta tus rodillas, tus ojitos fijos no hacen foco, y todos te conversan nada, y la bolsa vacia en tu bolsillo, y planetas y pastillas caen del denso cielo, estrellas y efebos asomando de alcantarillas, sos piel en la puerta, esperas que el universo te sorprenda otra vez, un nuevo licor, una nueva droga, un esquimal o quiza un taliban de cabellos plateados viajando en camellos de peluche con la barba enrulada y trayendo en su mochila doce lunas de papel mache.
Un boliche abre, un cabildo cierra, un grito en castillos olvidados, tus aliadas ocultas en reservados, tu chivo te perdiò y busca un pecesito nuevo, se interna en ese oceano desesperado de tragos cargados y sonidos.
Tus amigos a esta hora son clones transpirados y pupilas dilatadas. La morsa en la barra repitiò tu nombre y su colmillo brillò. Dos pisos arriba el Dj de vinilo se està derritiendo, sulfura plastico sobre parlantes y mueve sus brazos hechizado
La aguja de ser señalada por el tipo equivocado te está pinchando la humeda piel, ya no podes estar en pie
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Autor:
Leo Albanell (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 15 de agosto de 2025 a las 00:17
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 18
- Usuarios favoritos de este poema: Luis prieto, rubén3k 🇲🇽, Antonio Miguel Reyes, EmilianoDR
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