Entre el campanario de Nuestra Señora del Refugio y el cerro Proaño
una vena de aire sostiene al mundo.
Un ave, centella oscura,
corona la cruz como si encendiera
un faro para los peces invisibles
que nadan en el cielo.
Proaño bebe de la lluvia de esta tarde
y nutre sus vetas de memoria.
-
Autor:
Astronauta (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 13 de agosto de 2025 a las 16:03
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 3
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.