SUEÑO

Sueño que escapamos, y vamos a tirarnos al agua,
sueño que la comida es nuestra mejor aliada, 
y aunque nos operaron no aprendimos nada;

sueño que nos hicimos cárcel y viento al mismo tiempo, sueño que hacemos malabares entre el reloj y el esfuerzo para tocarnos aunque sea con la mirada.

Sueño que soy artista y tú una oficinista que ama la naturaleza;
sueño que tu pasado es amargo y tú eres una tonelada de dulzura; 
sueño que eres tan alta y yo no estoy a tu altura;
sueño que disfrutas de tratar mi piel como tratas a la tuya.

Sueño que soy rebelde y descuido mi vida 
y que me cuidas y me retas como una madre lo haría;

sueño que nos gusta escribir y redactar, pero también mancharnos en el lodo a hablar de los demás;

sueño que de tu sobrina me hice fan (ja)
porque es una niña con la mente de una señora mayor de edad. 

Sueño que al principio tus inseguridades te frenaban, pero conmigo otras cosas importaban; 

sueño que tantas veces preferimos la distancia,
pero entre nosotros hay nudos que aún no se desatan;

sueño que la música es una manta que nos cubre cuando la seriedad nos enfría, 
y nuestros cuerpos danzantes son los que nos iluminan cuando la oscuridad es enemiga.
Y la obra que nunca se terminaba llegó hasta ti con colores cálidos y sin una frase que tanto querías.

Sueño que somos serpientes y que nos enroscamos en la rutina y aún así triunfamos para estar presentes en nuestras retinas; 

sueño que lloras y me pides poner título a lo que nos pasa, 
y pienso que no hay más título que esta conexión que nos traspasa, 

y quizá pienses que poetizo todo, 
pero la vida es así no hay otro modo, 
a lo mejor la sociedad nos empuja a llevar una vida en ese sentido, 
pero la sociedad se vuelve nada cuando tus dedos se entrecruzan con los míos.

Sueño que cuando divagamos vivimos tantas vidas que este universo se resume en una sola estrella; sueño que intentamos ser amigos, y la amistad nos quedó muy pequeña.

Sueño que te sueño y aunque los días mejoraron, tu llama se apaga lentamente, 
y no lo digo por los dolores recurrentes, 
sino porque el sabor de tus labios desapareció de mi mente 
y necesito sentirlo nuevamente.

Sueño que eres más que tatuajes, cremas, y perfumes, eres la mejor conexión que tuve. 

Y no hay nada que cambie eso, 
aunque en ti aterricen otros besos, 
o alguien ensucie tu piel con otro cuerpo.

Seremos por siempre una hermosa conexión, no la más perfecta, pero sí la más profunda.