LA TOALLA DE MI ESPOSA
La toalla de mi esposa
cuelga aún del gancho en la pared,
como si el tiempo no pasara,
como si su piel volviera después.
Aún guarda su olor,
mezcla de jabón y costumbre,
y cuando la toco,
siento que el día respira distinto.
No es solo una tela colgada,
es una ausencia doblada en silencio,
una promesa de cuerpo compartido,
una rutina que sigue sin ella.
A veces la doblo
como si eso bastara para ordenarlo todo,
pero el hueco que deja el vapor
no se seca con gestos pequeños.
La toalla de mi esposa
es más fiel que la memoria,
más real que las fotos,
más cálida que el eco de su voz.
Y aunque ella no esté,
aunque el baño se llene de sombra,
su toalla sigue ahí,
esperando un regreso que no pregunto,
pero no dejo de imaginar.
© Corazón Bardo
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Autor:
CORAZÓN BARDO (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 8 de agosto de 2025 a las 23:51
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 14
- Usuarios favoritos de este poema: Annabeth Aparicio, Henry Alejandro Morales
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