Todo el tiempo vivo pensando en ti,
como si tu nombre fuera el pulso de mis días,
y lo que hago —sin remedio ni pausa—
es escribirte versos que respiran amor y melodía.
Cada palabra que nace en mi pecho
lleva tu reflejo, tu risa, tu brisa,
como si el papel supiera que existes
y se rindiera ante tu sonrisa.
Eres la musa que enciende mi tinta,
la razón por la que el silencio se convierte en canción.
Cada estrofa es un suspiro que te busca,
cada rima, un latido de mi corazón.
Escribo para ti porque te amo,
y amo escribirte porque en cada letra estás tú.
Eres el sol que ilumina mis versos,
la luna que me guía cuando la noche es azul.
En cada poema, te encuentro sin buscarte,
en cada línea, te abrazo sin tocarte.
Así, entre letras y sentimientos,
mi amor por ti se hace eterno, constante.
Porque tú no solo inspiras lo que escribo…
tú eres lo que escribo.
Mi poesía tiene tu nombre,
y mi alma, tu destino.
-
Autor:
Óscar Martínez (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 3 de agosto de 2025 a las 19:24
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 8
- Usuarios favoritos de este poema: Mauro Enrique Lopez Z.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.