Y la luna cabalgaba
arriba de una montaña,
arriba de lomas de oro,
sobre praderas con pinos,
sobre el mar, el río,
el alma,
deslizándose en la nada
antes que llegara el alba.
Y la luna se mostraba
llena de paz y de calma,
moviéndose por el cielo
como buscando las hadas
que volaban descuidadas
con aves de plumas blancas
detrás del cielo lunar.
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Autor:
Lucy (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 24 de julio de 2025 a las 22:07
- Categoría: Fantástico
- Lecturas: 20
- Usuarios favoritos de este poema: Sierdi, alicia perez hernandez, Lualpri, El Hombre de la Rosa, EmilianoDR
Offline)
Comentarios3
Y la luna bajó por la pendiente pradera.
Y el sol la saludó resplandeciente.
La Luna apenada, se escondió.
Y una Hada la vistió de estrella.
Alguien sonrió...
No fue la Luna, ni el Sol, ni el Hada.
¿Si sabes? Cuéntame.
La Luna duerme ahora.
Y yo también.
A lo mejor la que sonreía era yo, quién lo diría, nadie lo sabe, nadie podría ver en la noche de las hadas la algarabía. Un abrazo!
Gracias por compartir tus letras, querida amiga Lucy.
Buenas noches.
Igualmente, buenas noches Luis.
Hola Sierdi, te escribí una respuesta pero no la encuentro. Cosas de la magia de la internet, se habrá ido a algún agujero negro o a la nube.
Lamento que una vez que escribo algo cuando estoy inspirada no lo recuerdo de nuevo. Buenas noches para vos también.
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