PLENITUD

La llave entra en la cerradura y el mundo queda atrás
con sus ruidos que se sienten tan lejanos.
Los pensamientos profundos afloran,
el llanto de un niño que se escucha como el aletear de un ángel,
la luz se filtra por la ventana llena de paz y calidez los ambientes,
la gota que cae alimentando la planta de narcisos,
el abuelo que diviso a distancia  por la vidriera,
con su historia que cruza la Avenida y todas, 
todas esas cosas que vivimos a diario.
Como la sensación de un beso en un día perfecto
con todo el ser en las manos,la plenitud de un abrazo,
el remontar barriletes en un día de sol en plena primavera,
El día llegando a su fin con el cielo tenido de tonos
rosados palidos, como un paisaje de un cuadro pintado en acuarelas
y el alma se siente serena en casa-