Confesión

Una piedrecita blanca lleva mi nombre

En ella está escrita mi identidad frente a Dios

y no la que me adjudico como hombre

¿Quién soy yo?

Soy Jesús, cuando subo al altar, pero soy… Marcos, cuando bajo de el.

Ese que es… un inconsciente impostor: 

imaginativo compositor de meditaciones bellas;

leí dos versos y me hacen fama de poeta;

heredero de materna cultura que nunca desarrollé.

Adjudicatario de falsa experiencia como veterinario

Presumido lector, falso políglota engreído,

misericordioso confesor, que perdona con prestado perdón,

narrador de embellecidas anécdotas,

tembleque ministro de la Eucaristía…

Me refugio en oquedades vacías de vergonzantes frustraciones.

Soy… un dormilón que madruga,

un vago aprovechador del tiempo

un mediocre usurpador de talentos,

que viste ropa prestada y le queda… demasiado holgada,

y es un victorioso fracasado prisionero de sus exageraciones.

Solamente Vos me conocés por mi nombre, Señor.