Inmigrantes (i)

Jhetsefany

....

Tierra nueva, tierra nueva
bajo tristes evangelios,
aunque extraños en palabras
y en los verbos que conjugan
por pretéritos perfectos
que rememoran los ruegos
de otra tierra abandonada
donde quedaron los fierros.
Duras tabas, duras vidas
donde se apilan los sueños
y se entierran con embozos
que acompañan a los huesos.

Tierra nueva, savia vieja,
agua rala y sol eterno
que ilumina las promesas
y los ánimos de ajenos,
que templa las desconfianzas
y sentimientos heleros,
que riega con luz calada
los largos días de invierno.
Son las finas frondas verdes
de las salvias y romeros
con aromas que adormecen
los dolores de recuerdos.

Tierra nueva, poco santa,
llena de vagos bostezos
en las bocas que te dicen,
a veces, duros acentos,
porque buscas desiguales
en vástagos y sarmientos.
No existen las diferencias
en las caricias y el beso,
en la vida, en toda lucha
contra el sentido del viento,
en penas que van y vienen
y solo cambian de dueños.

 

Tierra nueva, tierra nueva,
tierra del sabor a pueblo,
no busques raya y frontera,
busca mejor el encuentro
con aquellos que la suerte
les viste como viajeros,
con los que no pueden ser
sedentarios en su suelo
y siembran por los caminos
las almendras de un destierro,
flores para caminantes,
flores que quitan el miedo.

.......

 

 

Jhetsefany

 

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.