Era una tarde triste
no puede ser de otra manera,
los grises del oprobio
se ven más grises
todavía.
El viento huele a sangre y a vergüenza.
La *civilizaciónmortaja*
humanoide acuchilla
poderosa,
y en esta oscura tarde yo
me pregunto,
¿Las células de mi alma son distintas?
¿Por qué matanza transitoria?
¿Lejano el horizonte perturbado?...
Cuando los mantras me suenan huecos
la paz es blanca...
porque es la
NADA
Patricia Garibay Dávila
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Autor:
Paty Garibay (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 23 de junio de 2025 a las 15:20
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 4
- Usuarios favoritos de este poema: Poesía Herética, Mauro Enrique Lopez Z.
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