"MI DAMA SOÑADA: ANTÁRTIDA"
Mi Bella Princesa, mi Dama soñada, así te siento Antártida.
Impoluta, prístina, indomable a ser conquistada.
Roca, hielo, nieve... Silencio eterno que nos obliga a respetarte.
Viento, tempestad, sonoridad casi silenciosa que a veces aterra.
Cielo gris, cielo azul... Mar calmo, mar tormentoso dibujado por caprichosos témpanos.
Extrañando la calidez de tus inicios y mareada por el frío que te representa.
Fauna inquieta que dibuja y llena de voces susurrantes tu desolado paisaje.
Líquenes y algas van construyendo día a día tu jardín nevado que, azorados, observan nuestros incrédulos ojos.
Copos de nieve brillantes que, en nuestro rostro se depositan suavemente, maquillándolos de eternidades
Auroras de mil colores que iluminan nuestras almas y enriquecen nuestro espíritu.
Silenciosa soledad nos impone, obligando a nuestros cuerpos genuflexos a entenderte, a respetarte, a admirarte, haciendo crecer ilimitadamemte nuestro verdadero yo interior.
Mi Dama soñada, mi desolada Antártida me dejaste conocerte y, por siempre, en humana entrega total, mi
ser agradecido, por siempre, en santificante veneración, te llevará en el corazón por los tiempos de los tiempos, eternamente agradecido.
Roberto Bardecio Olivera
(21/6/2025)
-
Autor:
Parapilino (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 22 de junio de 2025 a las 00:36
- Comentario del autor sobre el poema: Antártida, desde que tus hielos eternos pisé, fuiste mi Dsms soñada.
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 1
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.