Como gato callejero

Como gato callejero en plena lluvia,

me abrazo a los huesos del frío,

sin techo,

sin voz,

sin nombre que me espere.

Las gotas me buscan,

y me encuentran,

caen sobre un lomo erizado

de miedo, de dolor y de frio

y estoy aquí,

mirando el cielo

como si de él pudiera caer

algo más que agua.

Nadie ve que, sin abrigo,

me acurruco en la esquina

rota de la esperanza.

Me muevo entre charcos que todos esquivan,

como a mí,

que sigo y sigo,

con la mirada baja

y el alma hecha ovillo.

El mundo transita entre el sol y la noche,

y yo solo sobrevivo.

Soy sombra entre faroles,

bajo formas que no supieron ser abrigo.

la lluvia no cesa, y yo

aun dentro, dentro de mi vibro…