Las ratas no se terminan
circulan hoy por doquier
y aunque cueste comprender,
las ratas no se terminan.
De noche y día caminan
y se van a guarecer,
las ratas no se terminan
circulan hoy por doquier.
Ya ni van a los rincones
para hacer su fechoría
lo hacen a la luz del día,
ya ni van a los rincones.
Son ladrones los ratones
y son una porquería,
ya ni van a los rincones
para hacer su fechoría.
—¿Cómo hacemos con las ratas
que son viles roedores
si causando van dolores,
cómo hacemos con las ratas?
Hoy las miras de corbatas
siempre en los alrededores…
—¿Cómo hacemos con las ratas
que son viles roedores?
—¡Hay hermano qué destino
pues la rata ha de volver!
Aunque no la quieras ver…
—¡Hay hermano qué destino!
Nuevo mundo yo imagino
pero… —¿cómo he de creer?
—¡Hay hermano qué destino
pues la rata ha de volver!
Se van unas y otras vienen,
nunca paran de roer
porque en cada amanecer,
se van unas y otras vienen.
Y robando se sostienen,
siempre tienen que comer
se van unas y otras vienen,
nunca paran de roer.
Dice entonces hoy Don Juan...
—¡Jamás se van extinguir!
—¿Y cuál será el porvenir…?
Dice entonces hoy Don Juan...
—De algún lado otras saldrán
mientras otras han de huir,
dice entonces hoy Don Juan…
—¡Jamás se van extinguir!
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Autor:
Freddy Kalvo (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 11 de junio de 2025 a las 13:03
- Comentario del autor sobre el poema: La imagen adjunta fue tomada de Google.
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 52
- Usuarios favoritos de este poema: Santiago Alboherna, karonte, La Hechicera de las Letras, MISHA lg, Llaneza, Mauro Enrique Lopez Z., JUSTO ALDÚ, Lualpri, Antonio Miguel Reyes, Francisco Javier G. Aguado 😉, pasaba, alicia perez hernandez, Tommy Duque, Josué Gutiérrez Jaldin, EmilianoDR, Gibraltar, Lucía gómez, Patricia Aznar Laffont, Javier Julián Enríquez, Pilar Luna, David Arthur
Comentarios12
Cierto, las ratas nunca se van a extinguir
aunque podemos evitar su agencia
con un poco de buena voluntad al vivir
disminuirá su número e influencia.
Mis versos son aplicables a ambas especies, las ratas de 4 patas y para las de 2 tambn...jajaja
Jajaja...con tus últimas palabras no pude dejar de recordar a Paquita la del Barrio (QEPD).
Muchísimas gracias mi apreciado amigo Santiago. Gracias por tu visita y tus gentiles palabras.
Un abrazo fraterno.
nunca dejarán de existir mi dulce poeta
es un mal que creció en la necesidad de lo fácil,
las rataas perdieron , la integridad
interesanes tus letras mi dulce poeta
gracias por compartir
Se van unas y otras vienen,
nunca paran de roer
porque en cada amanecer,
se van unas y otras vienen.
Y robando se sostienen,
siempre tienen que comer
se van unas y otras vienen,
nunca paran de roer.
besos besos
MISHA
lg
Muy interesante y apropiada reflexión en tus palabras mi estimada amiga MISHA. Gracias por venir y comentar.
Un abrazo fraterno bella amiga.
Las ratas no son el mal que devora desde las sombras, son el síntoma visible de una estructura que se precia de su hedor. No caminan entre nosotros, nos gobiernan desde dentro. Visten de norma, se bautizan como progreso, se disfrazan de instituciones.
Los que aún se escandalizan por su presencia no han entendido que no se infiltran, emanan. Son hijas legítimas de un sistema que las amamanta con impunidad, que las premia con poder y que las santifica con urnas, títulos o billetes.
¿Quién construyó el nido?
¿Quién celebró al que robó con “inteligencia”?
¿Quién votó, aplaudió, vendió su silencio?
No hay plaga más resistente que la normalizada en la cultura cuando el veneno se disfraza de necesidad. No es que las ratas vuelvan. Es que nunca dejamos de alimentarlas. ¡Hay que demoler la madriguera en la conciencia colectiva!
No se necesita corrupción masiva para que las ratas dominen. Basta con que la mayoría sea cobarde.
La Hechicera de las Letras.
¡Hay que demoler la madriguera en la conciencia colectiva!
Muy de acuerdo... ¿Cómo?
Agradecido con la visita y comentario.
Un abrazo fraterno Hechicera de las Letras.
¿Cómo?
Para deshacer esa red de complicidades que sostiene el desastre, hay que empezar por no alimentar al oportunista que se beneficia del desorden. Eso implica rechazar con firmeza la normalización de conductas corruptas o serviles: no apoyar con el voto, no consumir lo que se obtiene por vías turbias, y no festejar el éxito basado en la falta de integridad.
Otra vía es hacer visible lo que muchos prefieren ocultar, señalar con valentía los abusos y malas prácticas, incluso en los pequeños círculos donde se da la complicidad silenciosa. Hacer que la sombra no tenga refugio.
La podredumbre se perpetúa porque existe un manto de indiferencia y conformismo. Romper eso es el único camino para vaciar el nido.
Y sí, es posible de hacer. No es fácil, ni rápido, ni cómodo, pero sí factible. El cambio empieza con pequeñas decisiones cotidianas, negarse a avalar lo que corroe, aunque sea en el núcleo más cercano, como puede ser este portal literario, resistir la costumbre de mirar para otro lado, hablar cuando todos callan. No necesitas grandes plataformas para impactar, una persona que deja de apoyar lo injusto ya quita un ladrillo del muro. Cuando muchos hacen eso, el muro se desmorona. Claro, el sistema está diseñado para que la pasividad sea la opción más sencilla. Por eso es un acto de rebeldía real decidir no ser parte del engranaje. La pregunta es si quieres ser cómplice o parte del desarme. Nada se logra sin voluntad. Pero voluntad hay. Solo falta decidir.
Saludos fraternales.
La Hechicera de las Letras.
Entiendo, pero eso que planteas solo puede hacerlo quien tiene conciencia de la realidad y, en ese caso, no se responde lo que tú propones: ¡Hay que demoler la madriguera en la conciencia colectiva!; por eso mismo, la pregunta a eso que tú encerraste entre signos de admiración, sigue siendo la misma: ¿Cómo?.
Pues al parecer. No sé exactamente cómo se demuele una madriguera incrustada en la conciencia colectiva. Ojalá tuviera el manual para la humanidad. Lo que propuse no es una fórmula es mi visión, es un llamado. A veces basta con eso, dejar de callar, dejar de aceptar lo torcido como norma.
La Hechicera de las Letras.
Entiendo, sé que no planteaste una fórmula y que es tu visión, de acuerdo. Mi pregunta y repregunta no pretendían molestar, sino, comprender la complejidad de semejante acción para lograr la transformación de la conciencia en la humanidad que, carentes de cultura y niveles educativos aceptables en buena franja poblacional mundial, se vuelve una tarea gigantesca y titánica, difícil de cumplir porque siempre están al acecho los elementos que integran la superestructura en una sociedad, como la religión, los medios de comunicación que bombardean la cabeza de los seres humanos depositando semillas de ideología que luego germinan, el derecho, la educación, la cultura. Y ese aparato ideológico (la superestructura), está administrado por quienes ostentan el poder y, difícilmente van a renunciar a él. Y lo que te expreso lleva implícita mi experiencia como educador. He trabajado con muchos grupos de personas haciendo conciencia pero lamentablemente todo se diluye y al final en la gente prevalecen más sus propios intereses que, en esencia son de supervivencia. Por eso Eduardo Galeano no se equivocó al decir que es más fácil manipular a un estómago hambriento y una cabeza vacía (esto es una paráfrasis a lo dicho por él en su libro: Las Venas Abiertas de América Latina).
El cómo tiene respuesta (educación política + cultura), pero no tiene acción (organización y lucha); al menos no en la cuantía que debería haberlo en ambos casos, pero ese es el reto que está y siempre ha estado planteado y creo, seguirá estando ahí.
Agradecido con las palabras y reflexiones provocadas.
Entiendo has caminado por senderos difíciles, enfrentando la cruda realidad donde la conciencia se ve asediada por estructuras que parecen inquebrantables. Asimilo la pesada carga que lleva quien intenta sembrar luz en tierras áridas, donde la indiferencia y la lucha por la supervivencia ahogan muchas semillas.
Sin embargo, no debemos olvidar que toda transformación, por vasta que sea, comienza en el terreno humilde del corazón y la voluntad de cada ser. La educación política y la organización social que mencionas no son sino frutos de esas pequeñas decisiones cotidianas que tú mismo señalas, el negarse a aceptar la injusticia, el no callar ante lo torcido, el sembrar preguntas donde antes solo había silencio.
Es cierto que el camino es arduo, que el sistema se defiende con uñas y dientes y que muchas veces la decepción pesa como un manto de concreto. Pero es justamente en esos momentos donde la esperanza debe revestirse de paciencia y fortaleza. Cada gesto, por pequeño que parezca, es un ladrillo que sostiene la posibilidad de un mundo diferente.
Que no se pierda jamás la certeza de que, aunque la lucha es gigante, no hay batalla que se gane sin empezar por la voluntad de uno solo y la tienen todos los que se atreven a no rendirse, con silenciosa furia, van minando sus cimientos. Y en eso, no hay fuerza que los detenga.
Ten un grato fin de semana.
La Hechicera de las Letras
Coincidimos en esto último; precisamente por eso mismo que razonas, no dejo de.hacer la lucha desde esta trinchera de las letras para generar debate y conciencia. Es un pequeño espacio, pero al igual que la gota que permanentemente cae sobre una roca, termina perforándola; así creo, puede ocurrir en la conciencia de quienes leen y, eso ya es un aporte que en su momento puede rendir los frutos esperados.
Reiterados abrazos fraternos y también mis agradecimientos.
Las ratas como el mal se expanden, se duplican y ya invaden los espacios.
Gracias Freddy.
Ah, ahora han surgido ratas de dos patas y de traje y corbata.
Abrazos.
Gracias por tu racional argumento mi estimada amiga ElidethAbreu.
Un abrazo fraterno buena amiga.
Antes había ratas a ratos
Hoy los ratos son de ratas
Y ni el veneno las mata
Ni les dan miedo los gatos.
Hoy abundan muchos datos
vinculantes a las ratas
y los gatos y las gatas
también hacen muchos tratos.
Un placer tu visita y comentario mi estimado FRANCISCO. Muy agradecido.
Un abrazo fraterno.
Un poema que, con tono sarcástico y estructura de rondó, denuncia la persistencia de la corrupción como plaga indomable. Las ratas, metáfora mordaz de los poderosos sin escrúpulos, se deslizan entre versos repetidos, como un eco social que no cesa. Crítica rimada, feroz y tristemente vigente.
Saludos
Muchísimas gracias mi estimado JUSTO ALDÚ por tu significativo argumento refelxivo. La estructura utilizada es la de los trioletos.
Un placer tu visita, lectura y comentario.
Un abrazo fraterno.
Ya veo. Siempre se aprende algo. Gracias.
Muy bueno y real querido amigo.
Las 🐀🐀🐀🐀🐀
Son plaga!
Fuerte abrazo!
En verdad que sí mi hermano, las ratas son una plaga y se expande por todos los lares habidos y por haber...
Un abrazo fraterno mi hermano. Que estés bien.
Igual tú 👍🏻🙋🏻♂️
Bonita sátira de humor dando placer a nuestras fieles seguidoras.
Bien dices, no faltaran nunca
Un fuerte abrazo hermano.
Mi hermano, muy agradecido con la suma de tus palabras a mis versos por la vitalidad que a los mismo otorga.
Un abrazo fraterno.
«Las ratas errantes»
Hay dos clases de ratas:
las hambrientas y las hartas.
Las hartas se quedan a gusto,
pero las hambrientas van por el mundo.
Recorren miles y miles de millas,
sin pausa, sin descansar.
No tuercen el rumbo en su marcha,
ni vientos ni lluvias las pueden parar.
Escalan las alturas,
los lagos a nado cruzan.
Muchas se ahogan o quedan desnucadas.
Las vivas dejan muertas a las abandonadas.
Tienen estos bichos
terroríficos hocicos.
Llevan cabezas rapadas, iguales,
bien radicales, bien raticales.
Las jaurías radicales
no saben nada de Dios.
Su prole no llevan a bautizar,
las hembras son propiedad comunal.
No quieren más que comer y beber
la muchedumbre ratil y carnal.
Mientras están comiendo y bebiendo, no piensan
que nuestra alma es inmortal.
Esta raza salvaje
no teme a los gatos, no teme al infierno.
Nada suyo tiene, no tiene dinero
y el mundo quisiera repartirlo de nuevo.
¡Dios santo! Las ratas errantes
se acercan a nuestra región.
Avanzan. Las oigo chillar.
Su número es legión.
Estamos perdidos, ¡ay!
ante las puertas ya están.
Menean la cabeza alcalde y senado,
a nadie se le ocurre un recurso adecuado.
Los burgueses empuñan las armas,
los curas tocan las campanas.
Peligra el santuario
del Estado decente que es la propiedad.
Ni las oraciones, ni las campanadas,
ni los ampulosos decretos del senado
ni los numerosos cañones pesados,
buenos muchachitos, les valdrán de nada.
Las mallas verbales tampoco ayudarán
de las oratorias sin actualidad.
No se atrapan las ratas con trampas silogísticas,
ellas saltan sobre las más sutiles sofísticas
El estomago hambriento admite solamente
sopa de lógica con albóndigas concluyentes,
sólo razones de vacas asadas
con citas de embutidos acompañadas.
Un mudo bacalao, con bastante manteca,
a los rojos radicales contenta
mucho mejor que un Mirabeau
y todos los tribunos después de Cicerón.
Henrich Heine
Agradecido con lo adjuntado mi estimado amigo Carlos Eduardo, me gustó leer a Heine, muy desconocido para mí, pero hoy ya no gracias a ti. Christian Johann Heinrich Heine (13 de diciembre de 1797, 17 de febrero de 1856).
Heine vivió 58 años durante la edad medieval, lo que significa que las ratas... ¡Tienen ratos de existir! Y lo peor, siguen vivas y nunca se van a exterminar...
Un abrazo fraterno mi apreciado amigo.
Pues si, si asi parece que las ratas no se van a extinguir nunca, al contrario se están procreando más cada día, no le veo que se acaben y lo más preocupante que ni el veneno para RATAS las acaba parece que son inmunes al VENENO del reclamo, y a las manifestaciones de miles y miles de personas defendiendo su derecho pero las RATAS son sordas y no escuchan a nadie. Un abrazo y un saludo mi querido amigo Fredy, sigamos levantando la voz y haciendo pancartas en su contra no desistamos de ALZAR LA VOZ
Muy cierto lo que razonas mi estimada amiga Ali. Se han vuelto inmunes, inclusive, a la justicia que nunca les llega (salvo cuando se mueren) Y sí, es necesario seguir levantando la voz contra esa plaga que causa sus daños y, a veces, irreversibles.
Un abrazo fraterno mi apreciada amiga Ali.
No, amigo querido jamás se extinguen toda esa especie metafórica de ratas.
Pululan por doquier y no existe veneno que valga, sólo de ellas/os hacia nosotros.
Abrazo, Freddy.
Inigualable Freddy.
Grata tu presencia igual que tus palabras mi buena amiga Patricia. Gracias por la credibilidad y vitalidad que le adjuntas a mis trioletos.
Un placer tu visita, tu lectura y comentario.
Un abrazo fraterno buena amiga. Que estés siempre bien.
Muy bueno tu poema Freddy tanto en la estructura como en la doble significado.
Un gran abrazo amigo
Arthur
Mi apreciado amigo Arthur, un placer tu visita y tu generoso comentario. Gracias por dotar de mayor fuerza mis versos. Vaya para ti mi gratitud y mi siempre abrazo fraterno.
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