El olor de tu ausencia

Pase por el pasillo de la facultad tras de ti, 

te di espacio para que entres primero, 
hice como que no te vi, 
disminuí el andar, para no cruzarme con esos ojos que anhelo, 
porque para que mentir, si de tanto extrañarte me muero, 
y me morí, claro que sí, 
por ende, pase por el pasillo con tu imagen ausente, 
pero se quedó ese olor, ese aroma que te pertenece, 
que significativo mi olfato que incluso él te recuerda, 
¿será que me fije en los detalles que mi corazón lacera?, 
porque, aunque te vi sin verte, 
te sentí, sin tenerte cerca, 
y me impregne de ti, incluso en tu ausencia,
creo que mi alma solo al tenerte en cuenta se sentencia,

Sin embargo, es mejor tenerte lo más lejos posible,

Porque de cerca no tardarías ni un segundo

en lesionar la ensoñación más mía que nuestra,

aquella que guardo en el bolsillo titulada “un nosotros” que ni en poemas se cuenta.