El día de tu adiós... (Poema recitado)

Seguramente algún día esta incierta nostalgia pasará,

pasará como pasan los otoños sin aflicción,

con la indolencia de los inviernos…

que solo cumplen su misión,

consuman su cometido…y se van…

sin cavilar …se alejan de la realidad…

sin preocuparse de un mañana esquivo…

mirando siempre al frente…nunca regresan a ver atrás

siguen su rumbo…sin que les importe lo que vendrá.

Todo pasa,

desde el más penetrante dolor,

a la desesperación que parece insoportable…

y los momentos de sosiego y paz,

a algún eventual estallido de risas de una fugaz emoción.

Todo pasa y es la triste verdad,

nada es permanente…ni indestructible,

ni el bien ni el mal…

Lo inaudito sucede,

lo fortuito se presenta casual,

nadie firma la certeza de lo que puede ser,

solo se vive de manera aleatoria…

casi sin sentido…esperando que se manifieste el destino …

y nos sorprenda con su inesperada forma de improvisar.

Hay amaneceres que despiertan cargados de ilusión,

convencidos que un maravilloso milagro puede acontecer,

hay tardes soleadas…que nos calientan el alma…

y nos hacen suspirar,

y en su cielo azul me he visto volar.

Hay noches brillantes…con una luna gigante…

dispuesta a acompañarme con su resplandor,

dispuesta a escucharme hablarle de mi amor,

así hay veces… imaginando ser feliz.

Pero otras veces…te arremete una impenetrable soledad,

en donde el silencio retumba con su estridente aullido de ansiedad,

con el universo comprometido con la oscuridad…

y una tempestad anegando los ojos de sensibilidad.

Dualidad…

las dos caras de la existencia,

entre el advenimiento de lo esplendente…

Y el tormento de las sombras…

que triunfaron el día de tu adiós.