Fin
La innegable sentencia de tu silencio…
evidencia a gritos su veredicto.
Mi aliento exánime se rinde…admitiendo su derrota,
y mi corazón exhausto…adormece sus latidos,
acomodando la tristeza en las gavetas de la resignación.
Que más podría hacer…sino esperarte en vano,
si sé bien que no vendrás…
así te aguarde todos los veranos.
Me quedé sin argumentos,
nada tuvo sentido a partir de tu silencio.
No puedo seguir engañando a mi nostalgia…
si ya no se escucha en el contexto…
ni el frágil hálito de tu respiro.
Se desvaneció el perfume de tu recuerdo,
ya no se percibe a nada…aquí,
en donde compartimos nuestra coincidencia.
Perdieron su colorido los geranios….
y los crisantemos que regabas…se han marchitado,
ha crecido la maleza en tu jardín…
y la memorable esperanza…
se ha salpicado de un tono envejecido…cansado.
Todo coincide ahora…
con la impotencia que siento,
como inevitable consecuencia del fracaso.
Ya no me queda valentía para buscarte,
hace tanto tiempo que me convencí de estar vencido…
y me conformé con mi destino.
Tu silencio,
aquel trivial acontecimiento…
fue la letal manera de impedir un último intento.
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Autor:
El Gitano de los Versos (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 24 de mayo de 2025 a las 00:20
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 11
- Usuarios favoritos de este poema: Classman, David Arthur
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