Queriendo, se aprende amar, como, amando, se aprende a querer - De la vida:

… Con deseo de quererte, amar, dejo verte,    

Pero Tú, sin amar, no muestras, querer…

syglesias

Presenta

Del ciclo de la Vida en Parejas…

Queriendo, se aprende amar, como, amando, se aprende a querer - De la vida:

“A veces, la vida, dice, nunca, nace lo que no sientes, 

Como lo sentido, se refleja, por el alma.”

Queriendo, se aprende amar,

Como amando se aprende a sufrir,

Si no sabes lo que quieres y a donde, vas,

Cuando se ama, sin ser, amado,

Amando se aprende a querer,

Como queriendo se aprende a sufrir,

Si no sabes lo que quieres y a donde, vas,

Cuando se quiere, sin ser, querido,

Son dos, conjugaciones, sin ser, iguales,

Se quiere de uno o se ama, por dos en la vida,

Sabiendo lo que quieres, como destino, cierto,

Cuando se ama, queriéndose en los brazos,

Por eso Yo te quiero, para no estar, triste,

Te amo, más que a mi vida, como no amé a ninguna,

Siento, tus caricias en las noches, calladas,

Como queriéndome, decir, que sea, solo, tuyo,

Esta, indecisión de desearme, solo en las noches,

No es suficiente, para amarte, sintiéndome, amado,

Yo quiero, ver, esa ilusión, reflejada en tus ojos,

Sin, temor al dormir y despertar, y no verte a mi lado,

Yo presiento que solamente, no será decir, te amo,

Que no habrá, imposibles, si Tú, estás a mi lado,

Dime, por qué al escucharte tu voz, renace mi alma,

Deseo, poder creer, que nunca, más, Tú, te irás de aquí,

Quisiera, mirar a tus ojos glaucos, sin tener que llorar,

Pensando, que pude ser feliz, sin sombra en el amor,

Siendo la soledad la que causó el temblor de mi voz en tu voz,

Al no verte que estaba, aquí, entre lágrimas, sin una consolación,

Pero esta vez, habrá reglas, con una sola, condición,

Que un día aprendas a quererme o amarme, sincera con amor,  

No te estoy, pidiendo mucho, más, de lo que hoy, me das,

No deseo, seguir siendo aquí el bueno, riéndote Tú en mi cara,

Te juré, entregarte, el alma, la vida y hasta mi corazón,

Que más, puede ofrecer un hombre, por amor de la mujer, amada,

Sabes, que estoy, enamorado de ti, que ya no sé, que a ser,

Por lo que sufro y estoy, padeciendo, ahora, por ti,

Pero no sé, que tienen tus ojos que atraen de esa manera,

O cuando me abrazas y con tus labios besas, olvido, todo,

Para adorarte, como se le adora a una diosa, por encantadora,

Que influencia, tienes con tus labios y tus brazos en mi cuerpo,

Has sabido, muy bien, hacer que te amé, solo a ti,

Sin buscar otros amores, como una razón, por existencia,

Porque a pesar de llegar demorada a veces, me miras con pasión,

Apartando de mi pensamiento en ese momento la indiferencia,

Siendo tarde para mí, devolverme tras las huellas del pasado,

Porque, con tu tibia palabra, apaciguas, cualquier, malestar,

Probé ser diferente hoy contigo un instante en nuestra unión,

Dándome cuenta, que en verdad, olvidarte, ya no puedo.

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Sergio Yglesias García

Caracas, 13/05/2025 4:30 P.M.