Patatas con carne..

Jhetsefany

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Día bueno que es de fiesta
cual si un santo regresara,
nuesta cocina se presta
hacia un plato de cuchara;
pero no es plato cualquiera,
¡alabemos al señor!,
entra en cocina ternera,
entra carne dando amor.

Aunque es sana la pobreza
llevaba con convicción,
el corazón también reza
por la divina ración;
qué ilumine la construmbre
cual por rara es dolorosa,
de echar algo a la legumbre
que la cubra más preciosa.

Qué no queden las patatas
penando por la desdicha
de no tener en sus matas
un fruto que sepa a chicha;
por favor, la vida es sueño,
qué lo dijo Calderón,
y por culpa del beleño
un filete es la visión.

Llega la Sexta. Especial.
El rezo se hace más grato
cuando anima la moral
al pensar en un buen plato,
y si hay seda entre la lana,
hermana, qué melodía,
mejor hoy que no mañana
ver en prosa poesía.


El momento se hace justo
tras bendición de la mesa,
y el consomé, muy adusto,
de primero nunca pesa,
pues los verdes tropezones
con la forma de guisantes,
aunque dan pedorros sones,
son humildes, no pedantes.

Y ya viene el principal
para paliar el deseo
de todo buen comensal,
da igual devoto que ateo,
y bueno, los ojos miran
pero no con mucha suerte,
entre trozos que se giran
¿algo para relamerte?

 

Oye hermana, cabe duda,
¿en tu cuenco puedes ver,
aún pequeña o menuda,
tajadita que comer?
A protesta no me atrevo
por un deseo doliente,
aunque estoy viendo algo nuevo,
¿hay patata transparente?

 

Ay ese icono divino..
¿Un trozito transparente?,
lo que estás viendo es tocino
y no es rancio, es lo siguiente,
y además viene con pelo,
muy solito, independiente,
ay flaca nena del cielo
y su gula permanente..

 

Pero entonces.. yo creía..
de los guisos de mi abuela,
cuando no era alegoría
echar carne en la cazuela,
aunque veo, algo hay oscuro
que quizás.. no hay quien lo muerda,
pues es como piedra, duro,
a un guijarro me recuerda.


Qué son las judias pintonas
que no pasaron por fragua,
no muerdas que te lesionas,
trágatelas, y con agua,
y no te sientas con pena
por no dar buen uso al diente,
mejor es la tripa llena
que tener la tripa ausente.

 

No, si ausente no me queda,
quedará llena de grava,
que si no se desenreda,
la escupiré como pava,
y si hoy toca opulencia,
qué Dios me tienda su mano,
pasaré más apetencia
que un platanal en verano.

 

.....

 

Jhet

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