Amargos y dulces, desabridos los colores,
vistosos los sabores, incandescentes los amores.
Van y vienen como agua en cascada y del río a la montaña.
De las luces naturales, tus fuegos artificiales que nacen y mueren cuando te llevo a los matorrales.
La vida misma ya es un juego, perdí mucho tiempo, pero contigo gané unos cuantos segundos.
Entrañable tu mirada, cuando suena el río se que viene mi amada.
El amargo sol y la dulce luna, nos veían y sonreían por las caricias que nacían de un amor que no entendían.
Al amor no le gusta la simplicidad,
la rareza para mí es lo más natural,
tú, mi acontecimiento excepcional.
E. M 🌹
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Autor:
Eduardo Martinez (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 19 de mayo de 2025 a las 18:56
- CategorÃa: Sin clasificar
- Lecturas: 24
- Usuarios favoritos de este poema: Mauro Enrique Lopez Z., Gianella (G.V.E.) 🌹, EmilianoDR, Pilar Luna, pasaba
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