Niñez es lo que deseamos cuando estamos grandes,
Niñez es lo que queremos para reír,
Es lo que nos hace falta para ser inocentes y humildes,
Etapa de ternura y abrazo de mamá y papá;
Aprendiendo el lenguaje, adquiriendo sentido de sí mismo,
Amor y temor es lo mismo porque dependemos;
Aprendiendo a palpar el mundo físico:
Redescubrir, lleno de asombro, envueltas de preguntas y preguntas;
Tamaño, tiempo, espacio y distancia son producto de su realidad.
Toda una etapa de aprendizajes, una vida de sueños, deseos,
Anhelos y esperanzas se convierten en un futuro alegre.
Ver la inocencia es disfrutar la vida:
Juegos, risas, diversión, son en la inocencia,
Raspones y golpes generan experiencia,
Una etapa que tiene que ser concluida.
Llega la adolescencia con fuerza, con nuevos propósitos, nuevos anhelos,
Todo se convierte en dificultades, todo se vuelve más problemático;
Amor, miedo y libertad se apoderan del adolescente,
Visiones cambiantes, tonos de voz diferentes;
Pensar distinto, juegos extintos,
Amistades largas, decisiones amargas,
Vida adolescente, vida de desarrollo:
¿Cuánto más tenemos que crecer? No sé.
¿Qué anhelos, deseos y visiones tenemos que olvidar? No sé.
Mas bien, ¿En qué momento hemos crecido? No sé.
Vida adolescente y cambiante a la vez, llevado por emociones;
En esto se resume: razones, preocupaciones, pasiones, canciones,
Ilusiones, desilusiones, vacaciones, decisiones e indecisiones, relaciones,
Cuestiones, adicciones, modificaciones, expresiones y lesiones.
Proceso corto y largo; proceso alegre y amargo:
Niñez con camino a la juventud.
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Autor:
Zacarias Santizo López (
Offline)
- Publicado: 2 de mayo de 2025 a las 11:13
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 6
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