Abril
No te dejé de amar, no…
Aún guardo tus gestos en la memoria y tu voz escondida entre las grietas de mi silencio. Pero un día de abril, sin lágrimas ni dramas, me dijiste lo justo, lo preciso, lo que dolía sin hacer ruido: esas palabras que no matan, pero marchitan. Y entonces lo entendí.
Entendí que no se trata de dejar de amar,
se trata de aceptar que, a veces, el amor no basta, que no importa cuánto abracemos, si el alma ya tiene frío, que incluso lo más bello puede volverse peso cuando se pronuncia sin ternura.
Ese día no fue una despedida oficial,
fue un susurro que rompió mi raíz, una frase pequeña como un adiós envuelto en rutina,
pero tan certera que me enseñó a soltar,
aunque aún amara, aunque aún soñara.
Desde entonces, te llevo conmigo sin retenerte. Como se lleva un verso que dolió escribir, como se guarda una foto que no se vuelve a mirar, como se recuerda abril:
no con odio, no con rabia… sino con el peso exacto de lo necesario.
-
Autor:
Khazz Hunter (
Offline)
- Publicado: 1 de mayo de 2025 a las 10:14
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 5
- Usuarios favoritos de este poema: EmilianoDR
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.