Yo también creo en el Papa Francisco, Angelillo de Uixó

¿ Queda aún algún idealista que piense que pueda salvar un mundo desalmado?

En una humanidad tan sometida a la burocracia , controlada y deshumanizada.

Se ha demostrado tras la muerte del papa Francisco, y la melancolía mundial que le ha seguido a su fallecimiento, que la humanidad pro apocalíptica y del asco mutuo en la que nos hemos adentrado, solo puede ser salvada quijotescamente teniendo al espíritu santo cómo heraldo de la revolución.

Porque el hombre, tal y como ha quedado de corrompido , estresado, enajenado, o expresado en términos católicos, tan maldito, ya no puede salvarse por si mismo, porque no puede pensar más que en si mismo, y servir a sus intereses.

Ese es el legado del Papa Francisco en el que creo.

El que yo he visto y lo he sentido en los movimientos anarquistas, humanistas, progresistas , comunistas…

Estar al lado del desfavorecido, del inmigrante, del desempleado, del precariado,

dando ánimos, mostrando algo de empatía por su situación de víctimas, al estar desfavorecidos por sus semejantes, y teniendo siempre unas palabras de consuelo para ellos , tal y como les gustaría que se las dieran a ellos mismos, a ese prójimo que vive una vida condenada en el infierno, siendo inocentes de toda culpa, mientras los culpables viven en mansiones bendecidos por millones robados a los más pobres.

Consolar también es una forma de ayudar, o por lo menos de no empeorar más sus existencias , mientras sobreviven los inocentes perseguidos como pueden y hasta donde pueden.

Amén, amén y amén.