Los dioses del alba dejan
un lloro vinoso al mar
y un murmullo de palomas
sin altar.
Los grandes derraman canto
en las barcas de las nubes,
y la lluvia anclada al llanto
se confunde.
Van en alas de presteza
entre el sueño y la ciudad;
todo en su mirada expresa
dignidad.
No se conoce su rostro
mas que un reflejo en el Sol;
su dulce huella en el polvo
es amor.
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Autor:
Enrique Fl. Chaidez (
Offline) - Publicado: 8 de marzo de 2025 a las 23:24
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 23
- Usuarios favoritos de este poema: Tommy Duque, Jaime Correa, José López Moreno., La Hechicera de las Letras, JUSTO ALDÚ, pasaba, El Hombre de la Rosa, Llaneza, alicia perez hernandez, Mª Pilar Luna Calvo
Offline)
Comentarios1
Hermosas y geniales tus gratificantes estrofas estimado poeta y amigo Enrique
Saludos de tu amigo Críspulo
El Hombre de la Rosa
Gracias, amigo Críspulo, por tan generoso comentario a mis humildes letras.
Saludos siempre.
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